domingo, 23 de julio de 2017

La otra cara de la moneda

Fuimos testigos de aquella celebración en el mar inmenso: luces azules, música para la ocasión, familia, amigos, amor y trajes de gala.

Después, luces naranjas.

Fuimos, también, testigos de aquel instante en el que la noche y el mar se fundieron con el cielo.

La vida; sonrisas y lágrimas. Unos bailaban y él se iba.

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